Los ciclos o períodos de la Violencia Intrafamiliar
1.-Acumulación de tensiones.
2.- Crisis o episodio agudo de violencia.
3.- Arrepentimiento y reconciliación
las tácticas de abuso que utilizan aquellas personas que ejercen violencia (minimización, justificación, negación, amenazas y coerción, intimidación, manipulación de los hijos, aislamiento, privilegios masculinos en las tareas domésticas, abuso económico, físico, psicológico y sexual) y el contexto familiar y social, en la cual impera y predomina una cultura patriarcal-machista, que legitima y naturaliza la violencia que ocurre contra la mujer
La combinación de modos violentos para la resolución de conflictos con adicciones o alcoholismo, suelen aumentar el grado de violencia y su frecuencia, pero muchos golpeadores no consumen drogas o alcohol. En efecto, muchas personas que consumen y drogas o alcohol, no son violentos. Son dos problemas, que deben ser tratados por separado.
Los golpeadores comúnmente culpan de su comportamiento a frustraciones menores, al abuso de alcohol o drogas, o simplemente a lo que su pareja pudo haber dicho y/o hecho. La violencia, sin embargo, es su propia elección, y como tal debe de asumir las consecuencias de ello. La violencia intrafamiliar no puede ni debe estar justificada en ningún caso, cualquiera que sean las circunstancias..
Debemos comprender que los actos de violencia intrafamiliar, afectan el ejercicio de los derechos, y que cada uno de nosotros debemos condenarlos y denunciarlos, ya que el uso de la fuerza u otros mecanismos de solución violenta de conflictos, no sólo atentan y transgreden los derechos de una persona con la cual se ejerció violencia, sino que a la sociedad toda, ya que se legitima y se valida a la violencia como mecanismo de resolución de conflictos. Los delitos jamás son cuestiones privadas, y menos aún cuando las víctimas no están capacitadas para defenderse.
Las mujeres maltratadas de menores recursos económicos, son más visibles, debido a que buscan ayuda en las entidades estatales y figuran en las estadísticas. Además, suelen tener menores inhibiciones para hablar de este problema, al que muchas veces consideran “normal”. Las mujeres con mayores recursos económicos buscan apoyo en el ámbito privado (consultan a psicólogo o abogado particular), y el asunto queda dentro de ese espacio. Cuanto mayor es el nivel social y educativo de la víctima, sus dificultades para develar el problema son más complejas.
Especialistas afirman que sólo un 5% de los hombres que maltratan a sus parejas presentan graves trastornos psicopatológicos. Si avaláramos está tesis, las personas que ejercen violencia, tendrían actitudes agresivas con sus empleadores, autoridades o incluso con Carabineros; las personas que utilizan la violencia saben y conocen muy bien con quien poder actuar de esa forma. Sólo un doctor debidamente certificado tiene las facultades, competencias y conocimientos para diagnosticar la enfermedad o patología mental de una persona.
Sin embargo la relación entre estas dos cuestiones no es la de causa-efecto; no todos los hombres que maltratan a sus parejas han sido testigos de violencia o han sido también maltratados, ni tampoco todos los hombres que han sido testigos de violencia o han sido también maltratados maltratan a sus parejas.
Cuando la persona desconfía de su pareja y la interroga.
Celos Patológicos
Estos celos son extremos. La pareja persigue a su pareja ,la vigila y acecha constantemente.
Celos Exagerados
Sin motivo aparente, la persona celosa discute e inventa fantasías y crea escenas de celos.